Tengo el disco duro del portátil a punto de reventar por sobrecarga. Necesito espacio en disco urgentemente. ¿Qué hacer? Un poco de limpieza 🙂 Llevo actualizando este viejo cacharro desde Ubuntu 7.04 (estamos en 9.04) así que de vez en cuando toca pasar la escoba. Desde la última actualización de versión de Ubuntu, he ido manteniendo al día todos los paquetes del sistema… incluído el kernel. Y claro, héte aquí que Ubuntu, precavido, cuando actualizas a un nuevo kernel no te borra el anterior, por si las moscas (de esta forma, si la actualización al nuevo kernel hiciera que algo dejara de funcionar, siempre puedes volver a la versión anterior). Eso tiene dos consecuencias: una, que el menú de GRUB acaba con scroll 🙂 y dos, que los archivos del kernel, módulos, cabeceras, etc. se mantienen en el disco duro. ¿Tánto ocupan? Hombre, en mi caso, no mucho, 500 y pico MB… no mucho si tienes un disco de 500GB… pero mucho si sólo tienes libres 0.9 GB 🙂 Conclusión: limpieza. ¿Cómo? Fácil:
uname -r
Te dirá la versión del kernel que estás usando en tu PC.
Abrir Synaptic (como root). Buscar: linux-image-2 (es el prefijo para buscar linux-image-2.*)
Marcar para borrar por completo todas aquellas entradas que NO coincidan con el kernel que actualmente usas (no la vayas a liar parda…) Esto tiene dependencias que Synaptic resolverá solito (linux-restricted-modules y linux-ubuntu-modules, por ejemplo). También te puedes cargar los paquetes linux-headers que no coincidan con la versión de tu kernel.
Es recomendable no pasarse en la limpieza, y tal vez, aparte de dejar el kernel actual (obviamente), también el anterior.
Finalmente, un apt-get autoclean, apt-get clean, apt-get autoremove eliminará también de la caché aquellos paquetes .deb que no uses y te sugerirá la desinstalación de otros que tampoco vayas a necesitar.