Ayer mismo, tolon nos comentaba que el Gobierno Vasco ha respondido a la pregunta de Aralar sobre si se va a implantar OpenOffice en sus oficinas. La respuesta es que sí, se va a implantar, para el segundo semestre de este año. Y no, NO se va a dejar de pagar las licencias de Microsoft Office, porque el GV dice que quiere que ambas suites «puedan convivir a voluntad y necesidad del usuario».
La respuesta también dice: «Actualmente se está realizando un “Estudio de Adopción de una Suite Ofimática de Software Libre (Open Office) en el PC Corporativo” (cerca de 7.000 puestos cliente de Departamentos, Organismos Autónomos y Sociedades Públicas del Gobierno Vasco) cuyo coste adjudicado es de 35.125.60 € (sin IVA). Durante el segundo semestre de 2010 está previsto realizar el despliegue de Open Office entre los puestos corporativos siguiendo las conclusiones y directrices obtenidas del estudio previo.»
Comentando la noticia con unos buenos amigos, al parecer soy de los que ven el vaso medio vacío. Y es que, como dice tolon, soy de la opinión de que tener la estrategia de permitir la convivencia de OpenOffice.org (OOo en adelante) con MS Office puede ser contraproducente para el software libre. «Ya está el cascarrabias de Juanan, nunca contento». Dejad que explique mi postura y luego decidís 😉
Si a cualquier persona (no tiene por qué ser funcionario) acostumbrada a Microsoft Office le instalas en el mismo PC un OpenOffice.org, ¿realmente alguien cree que esa persona va a usar OOo así, sin más?
Me apuesto lo que queráis a que harán lo que cualquier persona con dos dedos de frente, sin más motivación que la de terminar su trabajo cuanto antes para irse a casa haría: abrirá OOo para ver qué es, hará cuatro pruebas y volverá a usar MS Office, como ha hecho toda su vida y si nadie le dice lo contrario, seguirá haciendo (toda su vida). ES ABSOLUTAMENTE NORMAL que eso suceda así. Otra cosa es que eso sea DESEABLE.
La estrategia NO debe de ser café para todos. «Instalemos MS Office a la vez que OpenOffice.org y que sea el usuario quien decida» es una estrategia que sirve para calmar a las masas del software libre a corto plazo, y seguir haciendo lo que hasta ahora a medio/largo plazo (es decir, seguir usando MS Office).
Alguien dirá que «¡es un primer paso! ¿¡también te quejas de esto!?». De hecho ya me han dicho que soy de los que ve el vaso medio vacío.
La estrategia que yo propongo es:
1) termínese el estudio sobre implantación de OOo en el GV
2) hágase público (que no ocurra lo mismo que ocurrió con este otro informe… que por cierto, no era algo como «Informe para estudiar la posibilidad de implantación de OpenOffice.org en el Gobierno Vasco»… ¡a ver si estamos escribiendo dos veces lo mismo y no nos hemos enterado! Yo no lo puedo saber, el informe se declaró confidencial..)
3) una vez que el informe sea público, dejar un tiempo para que los profesionales del sector indiquen si todo está bien, si hay algo que aclarar, si hay algo que arreglar, puntualizar, etc.
4) Si el informe es positivo con respecto a la implantación de OpenOffice.org, entonces proceder a la progresiva erradicación de MS Office e implantación de OOo. Obviamente esto no se hará de la noche a la mañana, pero desde el principio, tomar la determinación de que se hará, y poner plazos, presupuesto y recursos para ello. ¡Ah! Ya no seríamos los primeros, lamentablemente perdimos en su día esa oportunidad. Al menos, así podremos aprender de los errores y aciertos de los demás (quien no se consuela es porque no quiere)
5) Llevar un control del ROI. La implantación de OOo y progresiva desaparición de MS Office tendrá un coste, que habrá que calcular (migración de macros, plantilla, formación, soporte…) y que habrá que ir amortizando con el tiempo (cada año, apuntar lo que sólo en licencias se podría estar ahorrando el GV y la administración que dé el salto en general). Publicar este cálculo.
6) Con el dinero que se vaya ahorrando a medio/largo plazo, reinvertirlo en mejorar aquello mejorable o que el GV necesite de OOo. El código fuente de OOo está disponible y hay empresas capacitadas para modificarlo. Si no, los ingenieros informáticos de las distintas facultades de informática, estarían encantados de poder trabajar en un proyecto de estos. O si al GV le parece que ninguna de estas opciones da la talla, también puede comprar el servicio de la «pequeñita» ORACLE, que a la postre compró SUN y por tanto, se llevó a todo el grupo de ingenieros de OpenOffice.org de esta última empresa. ORACLE estará encantada de dar soporte a GV en OpenOffice.org
No estaría de más que la futura oficina técnica del software libre de GV publicara resultados al respecto de este proceso de migración y adopción. Ahora sólo hay proceso de adopción, y como ya he dicho, en mi opinión, si ésta es voluntaria, será ínfima.